LECCION PARA EL DOMINGO 13 DE ENERO DE 2013
MATEO 23: 13 – 33
LUCAS 12: 1
INTRODUCCION:
En los versículos 13 al 26, encontramos la denuncia más terrible y explícita en el Nuevo Testamento. Como Plummer
escribía, estos ayes
son como un
trueno por su incontestable
severidad, y como un relámpago por su exposición indiscriminada... Iluminan al
mismo tiempo que hieren.
Aquí Jesús dirige una serie de siete ayes contra los escribas y
fariseos hipócritas. La versión Reina-Valera empieza cada uno de ellos con la
exclamación «¡ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!» La palabra
griega para ay es uai. Es difícil de traducir, porque incluye no solo ira sino
también lástima. Hay
aquí justa indignación;
pero es la
indignación del corazón
de amor, quebrantado por la
ceguera testaruda de las personas. Hay aquí, no solamente un aire de denuncia
manifiesta; también hay una atmósfera de tragedia lamentable. La palabra
hipócrita sale aquí una y otra vez. La palabra griega hypokrités quería decir en
un principio uno que contesta; y luego llegó a usarse especialmente para
designar al que tomaba parte en un diálogo en la escena; es la palabra griega
normal para actor. De ahí pasó a significar un actor en el peor sentido de .la
palabra, un farsante, uno que representa
un papel, que se pone una máscara, para ocultar sus verdaderas
intenciones, que representa
un personaje ficticio
mientras interiormente sus
pensamientos y sentimientos son
muy diferentes. Para Jesús; los escribas
y fariseos eran hombres que estaban representando un papel.
DESARROLLO:
Jesús
no pronunció estos «ayes» con un sentimiento
de odio o malicia en su corazón. Hay un sentido de «tristeza compasiva» en
estos versículos, a medida que el amante corazón de Cristo revela los corazones
perversos de sus enemigos. Era angustia lo que reveló, no ira. ¿Cómo es que
ellos «cerraron el reino»? (v. 13).
Primero, al rehusar recibir el mensaje de Juan el Bautista (21.25–27;
11.16–19).
Segundo, al rehusar reconocer a Cristo mismo (Jn 7.47ss).
Tercero, al esconder de la gente el verdadero significado de las
Escrituras (Lc 11.52). Al esconder «la llave de la ciencia» (Cristo, según se
ve en las Escrituras) detrás de las tradiciones hechas por los hombres,
escribas y fariseos, en realidad cerraban con llave la puerta del reino de los
cielos. ¡Qué trágico cuando los «líderes religiosos» de hoy cierran la puerta
dejando a la gente fuera del reino de los cielos al rechazar a Cristo, resistir
a su Espíritu y negarse a predicar y enseñar su Palabra.
Los fariseos devoraban las viudas pobres y se
adueñaban de sus posesiones bajo el pretexto de usarlas para Dios (v. 14). Eran
mentirosos llenos de codicia y «embaucadores religiosos».
Sus valores eran
confusos (vv. 16–22). Estaban interesados en el oro y las ofrendas, pero no en
la adoración espiritual en el templo (véase Lc 16.14ss).
«Sepulcros
blanqueados» (v. 27) se refiere a la práctica de pintar de blanco las tumbas a
fin de que los judíos no se contaminen por accidente (véase Nm 19.16).
«La medida de vuestros
padres» (v. 32) se refiere al creciente pecado de la nación desde los días del
AT hasta Hechos 7, cuando finalmente resistieron al Espíritu (véase Hch 7.51;
lea todo el discurso de Esteban para ver los detalles) y Dios dejó a un lado a
Israel. Mataron a los profetas; permitieron que asesinaran a Juan; iban a
crucificar a Cristo, a encarcelar a los apóstoles, matar a Esteban y «llenarían
la medida». Cuando pecamos, escribimos nuestra propia sentencia de juicio.
«Generación de
víboras» (v. 33) quiere decir «hijos del diablo» (véanse 3.7; 12.34; Jn 8.44; y
revise la parábola de la cizaña que se encuentra en Mt 13).
CONCLUSION:
LOS SIETE AYES
23.14
No permitir a otros entrar al reino de los cielos y no entrar ellos mismos
23.15
Alejar a la gente de Dios como ellos mismos
23.16–22
Ciegamente permitir que la gente de Dios siga las tradiciones hechas
por el hombre en lugar de la Palabra de Dios
23.23, 24
Involucrarse en detalles insignificantes pasando por alto lo que
realmente es importante: justicia, misericordia y fe
23.25, 26
Guardar apariencias mientras que su mundo privado es corrupto
23.27, 28
Actividad espiritual para cubrir el pecado
23.29–36
Pretender que se ha aprendido de la historia pasada, pero su
comportamiento presente muestra que no ha aprendido nada
Jesús mencionó siete formas para evitar la ira de
Dios, a menudo llamadas «las siete calamidades». Estas siete declaraciones
acerca de los líderes religiosos fueron dichas con una mezcla de juicio y
tristeza. Eran firmes e inolvidables. Están en vigencia cada vez que nos
adentramos tanto en perfeccionar la práctica de la religión que olvidamos que a
Dios también le interesan la misericordia, el amor verdadero y el perdón.
DIOS MIO QUE MENSAJE TAN TREMENDO
ResponderEliminarME AYUDADO MUCHO A ENTENDER COMO DEBE SER NUESTRO CAMINAR EN DIOS Y MEJORAR NUESTRA CONDUCTA COMO HIJOS DE DIOS, Y ME DEJO VER EL ESPIRITU SANTO DE DIOS EN DONDE ESTOY MAL Y FALLAND
. AMEN MUCHAS BENDICIONES.
Amen dice el pueblo de Dios.
ResponderEliminarAmen dice el pueblo de Dios.
ResponderEliminarAmen dice el pueblo de Dios.
ResponderEliminarAmén
ResponderEliminarQue triste es darnos cuenta de la manifiesta "hipocresía" en que vivimos, esta por demás. Dios se lamenta con: Ira/lastima. En un "Ay" de lamentación. Enderecemos el camino y sigamos el derecho la justicia del Santo de Israel.Amén//
ResponderEliminarAy Señor Padre Eterno dadnos sabiduría para hacer tu voluntad en tus manos tu pueblo
ResponderEliminarLibre albedrío, sólo con nuestra fe y la puesta en práctica de la palabra de Dios encontraremos el camino correcto. Cuánta fuerza de voluntad se necesita para no perder el camino y no soltar la mano de nuestro padre. Oh! Señor padre y Dios mío ten misericordia de tu pueblo.🙏
ResponderEliminarSeñor permite instruirnos en tu sana doctrina para caminar conforme a tu voluntad,y a caminar siempre en la verdad que es tu palabra aquella que es lumbrera de nuestros pies para no caminar en falso sino dando pasos seguros....Dios les bendiga!!!
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