Lección: Romanos 16:1-16
Texto: 1 Corintios 16:19-20
Domingo 29 de julio 2018
Texto: 1 Corintios 16:19-20
Domingo 29 de julio 2018
INTRODUCCIÓN: Este capítulo contiene una larga lista de personas, a las cuales Pablo hace mención, es La expresión más extensa e íntima del amor y del afecto del apóstol, hacia otros creyentes y colaboradores en todas sus epístolas. En el evangelio no hay acepción de personas, ni distinción de clases sociales: En estos saludos, encontramos gente distinguida, como otros, siervos o esclavos, también parientes del apóstol, hay al menos 27 nombres y otros tantos anónimos, para todos ellos, los saludos con amor fraterno de este gran apóstol. Veamos los detalles.
DESARROLLO: Comienza estos saludos de la siguiente manera. “Os recomiendo además a nuestra hermana Febe…” (v.1a). Creemos que fue ella la portadora de esta carta. La recomienda encarecidamente a los fieles de Roma, su nombre significa “brillante” y “radiante”, es como el femenino de Febo, nombre dado al sol por los griegos. Ella “es diaconisa de la iglesia de Cencrea” (v.1 b). El término “diaconisa” se traduce “sierva”, en la iglesia primitiva las siervas cuidaban a los creyentes enfermos, los pobres, los extranjeros y a quienes estuvieran en prisión, además, de ciertos servicios de limpieza en la iglesia. Pablo la llama también en el v.2 “prostatis” (griego), “ayudadora”. Cencrea una ciudad portuaria a 10 u 11 kilómetros de Corinto.
Pide el apóstol “que la reciban en el Señor” (v.2a). Siempre que los cristianos iban de una a otra iglesia, llevaban carta de presentación (un cristiano ordenado sale por la puerta pide carta a su pastor). Pide que sea acogida como una verdadera creyente “como es digno de los santos” y que sea apoyada en todo lo que necesite “pues ha ayudado a muchos y a mí mismo” (v.2b), ¡que tremendo testimonio de servicio al cuerpo de Cristo!
Pide el apóstol “que la reciban en el Señor” (v.2a). Siempre que los cristianos iban de una a otra iglesia, llevaban carta de presentación (un cristiano ordenado sale por la puerta pide carta a su pastor). Pide que sea acogida como una verdadera creyente “como es digno de los santos” y que sea apoyada en todo lo que necesite “pues ha ayudado a muchos y a mí mismo” (v.2b), ¡que tremendo testimonio de servicio al cuerpo de Cristo!
“Saludad a Priscila y Aquila” (Pablo usa el termino diminutivo que es más familiar, el verdadero nombre es Prisca quiere decir Antigua). A este matrimonio, Pablo lo conoce, desde su segundo viaje misionero, cuando pasa por Corinto, ya que eran del mismo oficio (fabricaban tiendas de campaña) (Hechos 18:1-3), ellos habían sido expulsados junto a los demás judíos de Roma en el año 52 por el emperador Claudio. Pero, Claudio había muerto y Nerón se mostraba más afable, comprensivo y flexible con los judíos (mientras vivió Seneca su mejor consejero). Ahora se encontraban en Roma. Pablo los llama mis colaboradores en Cristo Jesús (v.3b), es decir, al servicio del Evangelio de Cristo. Es probable, por ser el principal obrero en el oficio (Aquila = Águila), y su esposa se dedicaba más al estudio de la palabra, que a Priscila Pablo la presenta siempre en primer lugar. En una ocasión “expusieron su vida por mi” (v.4a) quizá en Corinto o Éfeso, pero los detalles se desconocen, por lo que estaba muy agradecido y también “todas las iglesias de los gentiles” (v.4b). Además, de esos elogios, Pablo tiene la delicadeza de saludar la iglesia que está en casa de ellos. (Recordar que los edificios o Templos cristiano aparecieron al final del siglo segundo).
Continúa el apóstol con una serie de saludos. “Epeneto” (significa alabado), fue el primer convertido de Asia Menor (Turquía), “Saludad a María la cual ha trabajado mucho entre nosotros”. (María, hebreo = Miriam, señora), indica que esta hermana había jugado un papel muy importante en la organización de la iglesia (probablemente, Priscila y Aquila informaron el desempeño de esta cristiana en algún momento).
Continúa el apóstol con una serie de saludos. “Epeneto” (significa alabado), fue el primer convertido de Asia Menor (Turquía), “Saludad a María la cual ha trabajado mucho entre nosotros”. (María, hebreo = Miriam, señora), indica que esta hermana había jugado un papel muy importante en la organización de la iglesia (probablemente, Priscila y Aquila informaron el desempeño de esta cristiana en algún momento).
Andronico y Junias (v.7) mis parientes, este apelativo podría indicar algún parentesco según la carne, algún tanto lejano, convertidos al evangelio antes que Pablo, así se explica que fuesen “estimados entre los apóstoles”, es decir, bien conocidos de los apóstoles por su pronta entrega a Cristo. Encontramos a Amplias (v.8) (quiere decir “Ensanchado”, amado mío en el Señor, acota el escritor. Este nombre era común entre los esclavos de la casa del Emperador en aquel tiempo. Pudo haber sido uno de los “de los de la casa de Cesar” (Filipenses 4:22). Urbano (v.9) se gana el título de “colaborador” y Estaquis (espiga de oro), a quien también llama amado mío.
“Saludad a Apeles” (v.10) al que llama “aprobado en Cristo Jesús”, por alguna aflicción o persecución fielmente sufrida por causa del Señor. También, saluda a Aristóbulo (significa, muy buen consejero), del que dicen los entendidos que era nieto de Herodes el Grande y hermano de Agripa I, puesto que no recibe un saludo personal, es posible que no fuera creyente, pero si algunos parientes y esclavos de su casa. “Herodion” (v.11), posiblemente también, esclavo, “mi pariente” o compatriota de Pablo, quizás el único esclavo judío de la casa de Aristóbulo. “Saludad a los de la casa de Narciso”, según eruditos Narciso era un liberto (esclavo que le concedieron la libertad) quien había llegado a alcanzar una alta posición y que al llegar Nerón al trono le dio muerte, por eso el saludo va a los de su casa. La inclusión de esclavos en la lista de nombres, nos recuerda que en Cristo se borran todas las distinciones sociales, porque todos somos unos en Cristo (y el que está en Cristo nueva criatura es).
“Saludad a Apeles” (v.10) al que llama “aprobado en Cristo Jesús”, por alguna aflicción o persecución fielmente sufrida por causa del Señor. También, saluda a Aristóbulo (significa, muy buen consejero), del que dicen los entendidos que era nieto de Herodes el Grande y hermano de Agripa I, puesto que no recibe un saludo personal, es posible que no fuera creyente, pero si algunos parientes y esclavos de su casa. “Herodion” (v.11), posiblemente también, esclavo, “mi pariente” o compatriota de Pablo, quizás el único esclavo judío de la casa de Aristóbulo. “Saludad a los de la casa de Narciso”, según eruditos Narciso era un liberto (esclavo que le concedieron la libertad) quien había llegado a alcanzar una alta posición y que al llegar Nerón al trono le dio muerte, por eso el saludo va a los de su casa. La inclusión de esclavos en la lista de nombres, nos recuerda que en Cristo se borran todas las distinciones sociales, porque todos somos unos en Cristo (y el que está en Cristo nueva criatura es).
Trifena y Trifosa (v.12): Sus nombres significan “Delicada” y “Refinada”, mellizas trabajadoras en el Señor, lo mismo que Pérfida (de Persia, su lugar de origen), mayor que las anteriores, que llevaba más tiempo trabajando para el Señor. Otro saludo, a Rufo (v.13) (significa Pelirrojo), muy posible hijo de Simón de Cirene (mencionado en Marcos 15:21), su madre había prestado buenos servicios al apóstol por lo que él le llama “madre mía”.
Sigue una lista de 9 nombres, que incluye también a los hermanos (en el v.14, cinco nombres más los hermanos y en el v.15 cuatro nombres más los santos que están con ellos). He aquí los 9: Asincrito (Incomparable), Flegonte (Ardiente), Hermes (interprete de los dioses), Patrobas, Hermas (otra forma de Hermes), Filólogo (amante del Lenguaje), Julia (nombre común entre los romanos) Nereo (húmedo), cuya hermana es Olimpa (referente al Olimpo, es cielo de los dioses griegos). Termina el apóstol con un saludo a todos con ósculo santo (v 16).
CONCLUSIÓN: Pablo, vivía preocupado por las iglesias y hacia siempre oraciones por cada una de ellas (Romanos 1:9; Efesios 1:16; Filipenses 1:3-4; 1 Tesalonicenses 1:2). Sin embargo, él podía recordar a cada uno y expresar su preocupación por ellos, lo que es sobresaliente, es que hay en los saludos una mezcla de nombres comunes y de esclavos, nombres de nobles romanos y de familias judías. Hay nombres de hombres y de mujeres, de hombres libres y de predicadores itinerantes. Cuando llega el evangelio de Jesús caen las barreras y podemos ser unos en Cristo.
CONCLUSIÓN: Pablo, vivía preocupado por las iglesias y hacia siempre oraciones por cada una de ellas (Romanos 1:9; Efesios 1:16; Filipenses 1:3-4; 1 Tesalonicenses 1:2). Sin embargo, él podía recordar a cada uno y expresar su preocupación por ellos, lo que es sobresaliente, es que hay en los saludos una mezcla de nombres comunes y de esclavos, nombres de nobles romanos y de familias judías. Hay nombres de hombres y de mujeres, de hombres libres y de predicadores itinerantes. Cuando llega el evangelio de Jesús caen las barreras y podemos ser unos en Cristo.